martes, 6 de septiembre de 2016
MASIA CAN
BUSQUETS
Nos encontramos en Vallcanera (Girona) con una preciosa masía
de época comida por la maleza y abandonada a su suerte. En sus muros aún
resuenan los disparos de la Guerra Civil y las
voces de los niños que acudían cada mañana a la escuela cercana.
A escasos kilómetros de la capital, perdida en medio del
bosque y olvidada, se halla una hermosa villa señorial que fue lugar de gran
actividad agraria y que hoy es famosa por los fenómenos paranormales que en
ella se producen.
En el año 1497 esta masía tomo el nombre de Can Busquets y
tenía una escuela en los alrededores. Alrededor de 300 años después fue comprada por un monje. A finales del
siglo XIX Rafael Baster y Llagostera encargó la construcción de una
preciosa casa de recreo. La enorme finca también contaba con una capilla, una
casa para el servicio y una escuela infantil.
La villa modernista tenía suntuosos salones, uno de
los cuales contaba con una preciosa chimenea adornada con ángeles y gárgolas.
También se dispuso un sistema de canalización y se construyó un lago de recreo
en la propiedad, lo cual nos da idea de la fortuna que la familia pudo amasar
con su negocio de transporte marítimo en Marsella. En 1922 pasa a llamarse
Antigua Escuela Sta. Victoria-Busquets de Vallcanera.
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Escuela Santa Victoria-Busquets en 1936
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Durante la
Guerra Civil , la gente de pueblo habla de tiroteos en la
finca entre el bando sublevado y el republicano incluso de fusilamientos. De
túneles que dicen que salen de la masía hacia tres direcciones diferentes, una
de ella hacia la iglesia de Vallcanera, donde dos familias enteras fueron asesinadas
por cuestiones de herencia en dicho lugar incluyendo a los niños y unos
caballos que tenían en el establo.
La leyenda de la finca continúa actualmente
con varias muertes, una chica ahorcada en un árbol, un drogadicto encontrado
muerto junto a la chimenea.
Dicen que en las noches se oyen sonidos de disparos y voces
de niños. Otros afirman que al pasar por la propiedad las motocicletas se
detienen y no consiguen arrancar hasta abandonar la finca. En las
grabaciones se oyen extraños lamentos de
niños, voces que invitan a irse con un
tono no muy amigable.
De hecho, se han recogido psicofonías tanto en castellano
como en catalán... Incluso hay quién asegura que en fotografías aparecen personas que no estaban físicamente.
Tras caer la casa en estado de ruina en los años 50, muchos
son los que se acercan a ella atraídos por el halo de misterio que la rodea.
